Como ya todos sabemos una alimentación saludable se consigue a base de la combinación de varios alimentos. En esta combinación es imprescindible aportar en la dieta gran cantidad de vegetales. Estos alimentos nos aportan una amplia variedad de nutrientes: hidratos de carbono, fibra, vitaminas y minerales.
La forma más correcta de integrar este producto en la dieta es cruda, ya que de esta manera resguarda todas sus propiedades.
Pero no siempre es la primera opción entre los consumidores y esto se debe a que las verduras frescas tienen un período de conservación menor que las congeladas. Y te preguntarás, ¿las congeladas son menos saludables? Pues la respuesta es no, ya que una congelación adecuada es capaz de preservar todas las propiedades y nutrientes de las verduras frescas.
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